Aumentar la confianza en uno mismo nos ayuda a enfrentar las dificultades que atravesamos en nuestras vidas. Las personas que confían en sí mismas tienen una serie de características que las diferencian de las demás.
Existen muchas estrategias para aumentar la confianza en uno mismo, que pueden ayudar a las personas que no confían en sí mismos y en sus capacidades de forma natural.
Estrategias para aumentar la confianza en uno mismo
1. Para aumentar la confianza en uno mismo empieza por reconocer tu propio valor
Lo primero que debemos evitar es subestimarnos a nosotros mismos y a nuestras capacidades. Reconocer nuestro valor como personas con características únicas y definitorias es el primer paso para confiar en nosotros mismos.
Nadie es perfecto, pero todos merecemos el mismo respeto y dignidad. Debes empezar por respetarte y reconocerte a ti mismo.
2. Pero también tus errores
Para llegar a la cima, lo normal es que antes nos caigamos muchas veces. Admitir nuestros fracasos, saber cuándo debemos detenernos para recapitular y aprender de lo que hemos hecho mal, sin miedo.
Aprender de nuestros errores para dirigirnos al futuro con más conocimiento y mejores herramientas, sabiendo que, si hemos superado un obstáculo, podremos hacerlo de nuevo hasta alcanzar nuestro objetivo.
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3. No desprecies tu intuición
Cuando nos encontramos ante una decisión importante debemos escuchar lo que nos dice nuestra intuición, nuestro instinto.
Si algún aspecto no te termina de convencer, si escuchas una «vocecita» que te dice que no escojas esa opción, es probable que tenga razón. Cuando tomes una decisión, hazlo sabiendo y «sintiendo» que es la decisión que quieres tomar.
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4. Aumenta la confianza en uno mismo con asertividad
Reconocer cuándo la prioridad son nuestras necesidades y cuándo lo son las de los demás te ayudará a ganar confianza.
Ser más asertivo, aprender a expresar y satisfacer tus necesidades te ayudará a establecer, también, relaciones más equilibradas, y ganarás el respeto de las personas con las que tengas relación.
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5. Cultiva y sigue tus propios valores
Conocer los propios valores y expresarlos sin miedo y con naturalidad es una característica de las personas que confían en sí mismas. Conociendo nuestros valores y actuando de acuerdo a ellos, obtenemos tranquilidad y confianza en nuestro comportamiento.
Comportarnos en base a los valores de los demás trae inseguridad y malestar. Por ello es importante que tengas claro cuáles son los tuyos y actúes en consecuencia.
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6. Para aumentar la confianza en ti mismo conoce y respeta tus límites
Conocer tus límites y establecerlos. Para ganar autoconfianza debemos ser capaces de decir «no» cuando no queremos algo.
Aprender a marcar nuestros límites nos ahorrará sentimientos de ansiedad o estrés, producidos por hacer cosas que en realidad no queremos hacer. No es necesario que seamos bruscos pero sí es necesario que seamos firmes.
7. Tu debilidad y tu fuerza, conócete a ti mismo
Conocer nuestras fortalezas y nuestras debilidades y ser sinceros con nosotros mismos (y con los demás) acerca de aquello que podemos y que no podemos hacer.
Nuestras fortalezas se pueden trabajar y hacerlas cada día mejores, mientras que las debilidades no tienen por qué suponer una amenaza. Las debilidades se pueden trabajar, en caso de que sea necesario y, en cualquier caso, el hecho de pedir ayuda no debe identificarse con inferioridad, pedir ayuda es un gesto de humildad.
8. Si no puedes cambiar algo, no inviertas energía
Debemos evitar preocuparnos por factores que no podemos controlar. Pretender cambiar algo que no se encuentra bajo nuestro control nos llenará de impotencia y frustración.
El sentimiento de culpa puede pesar sobre nosotros porque asumimos responsabilidades que no son nuestras. Debes aprender a identificar cuándo puedes y cuándo no puedes cambiar las cosas.
9. Argumentos, sí. Excusas, no
Cuando cometemos errores, lo mejor es exponer una explicación sincera de lo ocurrido. De la misma forma en que debes aplicarte esta norma a ti mismo, debes aplicarla a los demás.
Si alguien comete un error y te ofrece una explicación sincera y razonable, debe ser merecedor de tus disculpas. Si, por el contrario, lo que encuentras son excusas y justificaciones peregrinas, la persona que tienes delante no es digna de tu confianza y muestra un comportamiento inmaduro.
Aprender a diferenciar ambos tipos de situaciones y no ceder en las segundas, aumentará tu autoconfianza.
Aumentar la confianza en uno mismo requiere trabajo y compromiso. La ayuda de un profesional hará el trabajo más sencillo y te enseñará a percibir los cambios progresivos que vayas alcanzando.
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