¿Es lo nuestro una relación tóxica?
- La comunicación es intensa y frecuente. La mayoría se da en las redes sociales o a través de mensajes. Las charlas son continuas y van muy deprisa, como si tuvierais una gran necesidad de estar en contacto todo el día, todos los días.
- La información que intercambiáis es superficial y no revela aspectos que permitan conocer al otro en profundidad. Cuando comparte algo de información más significativa que pueda sonar alarmante como «no se me dan bien las relaciones», probablemente sentirás interés por escuchar los motivos de la afirmación y querrás seguir investigando al respecto.
- Durante el comienzo, es muy posible que recibas noticias de él muy frecuentemente y tengas la sensación de que todo va demasiado deprisa, tanto que puede que se activen tus mecanismos de temor. Sin embargo, tras este periodo de intensidad y emocionalidad, el contacto se detiene, se vuelve más frio y apático sin ningún motivo aparente.
- Cuando la relación va estableciéndose, puede volverse posesiva. Ya no os comunicáis como antes, ya que ahora la comunicación es más defensiva, conflictiva y discutís más. Cualquier comentario puede hacer saltar la chispa cuando, en el momento en el que estáis, deberíais estar «encantados de conoceros».
- La relación se vuelve más y más intensa en un periodo muy corto de tiempo. Se alternan periodos de discusión con periodos de hacer las paces, lo que puede dar sensación de intimidad más intensa entre los dos.
Tener en cuenta estas sencillas señales puede ser útil para detectar una relación tóxica. Una relación tóxica suele ser difícil de detectar cuando uno se encuentra sumergido en ella ya que le invaden las emociones. Sin embargo, la relación tóxica se suele ver con mucha más claridad desde fuera.
Teniendo en cuenta estas señales, podrás detectar si tú o alguien de tu entorno está viviendo una relación poco sana, una relación tóxica.
Imágenes: Pixabay
2 comentarios. Dejar nuevo
Me cfasina estos reportajes
Me alegra que te gusten, Narcisa 🙂