La curiosidad es una capacidad que tiende a disminuir con el paso de los años. El día a día, la rutina, la falta de tiempo, hacen que desarrollar la curiosidad ocupe los últimos puestos entre nuestras prioridades.

Sin embargo, la curiosidad es un factor clave en más aspectos de los que podemos pensar. Gracias a la curiosidad, a las ganas de conocer más acerca de algo, el interés en experimentar de primera mano determinados eventos, el ser humano ha sido capaz de conocer su entorno, conocerse a sí mismo y a su especie, explorar el arte, la ciencia, la biología.

Y es que la curiosidad es un potente motor de motivación en muchos aspectos de nuestra vida. Es por ello que desarrollar la curiosidad supone un factor importante y se convierte en una tarea en la que debemos invertir tiempo y recursos porque puede aportarnos mucho bienestar.

Desarollar la curiosidad: ¿por qué es importante?

1. Es importante para la inteligencia y el aprendizaje

La curiosidad, como hemos anticipado antes, ha sido y será uno de los motores principales de los logros intelectuales del ser humano. La curiosidad nos conduce a tener un mayor interés por aprender algo y a hacerlo de forma más rápida y satisfactoria. La curiosidad es una especie de «hambre» que necesita ser saciada. Los gatos saben bien a qué nos referimos (y vosotros también).

2. Desarrollar la curiosidad es importante para las relaciones sociales

La curiosidad nos lleva a interesarnos por las cuestiones que afectan a las personas con las que nos relacionamos. Gracias a la curiosidad, nos esforzamos por obtener información sobre otras personas con el fin de comprenderlas. Por otra parte, la curiosidad también nos lleva a sentir interés por conocer a otras personas y ampliar así nuestro círculo de relaciones, lo cual nos aporta muchos beneficios para nuestro bienestar emocional.

3. También para encontrar significado

A la vida y a todas las cuestiones relacionadas con ella. La curiosidad nos lleva a hacernos preguntas acerca de nuestra existencia, de nuestro propio «yo», y de muchos más aspectos. La curiosidad va más allá del conocimiento en sí mismo, de la información en sí misma. La curiosidad también «quiere conocer» el significado último de la información, lo cual nos acerca al deseo de conocernos a nosotros mismos y a nuestro crecimiento personal.

4. Desarrollar la curiosidad es importante para nuestra salud

El hecho de que nuestra mente se mantenga activa, en busca de nuevos aprendizajes, nuevos conocimientos, hace que, a su vez, nuestro cerebro se mantenga activo y «en forma». La mente funciona igual que un músculo y el ejercicio que más le gusta es la curiosidad.

Nuestra salud, inteligencia y aprendizaje, relaciones sociales y significado profundo de las cosas, son todos factores directamente relacionados con nuestra felicidad y bienestar emocional. Por ello, la importancia de desarrollar la curiosidad es clara.

¿Qué puedo hacer para desarrollar la curiosidad?

De forma orientativa, os vamos a señalar cuatro formas de mantener la curiosidad en forma y no dejar que se desvanezca.

1. Lee más

Leer abre la mente. Leer abre la mente a nuevas ideas, nuevas perspectivas, nuevos mundos. Y, a medida que la mente se abre, descubre que queda aún mucho más por conocer, lo cual a su vez alimenta la curiosidad.

2. Replantea situaciones corrientes

Las situaciones comunes, las del día a día, pueden suponer una fuente de curiosidad importante si somos capaces de mirarlas a través del cristal adecuado. Observa. Probablemente surjan preguntas acerca de lo que ves. Seguro que descubres muchos más misterios de los que crees.

3.Desarrollar la curiosidad: ¿Quién dijo miedo?

Y es que son innumerables las situaciones que nos dan miedo, que nos asustan, pero al mismo tiempo, nos suscitan tanta curiosidad que cometeríamos la «locura» de hacerlas, solo por satisfacerlas. La curiosidad puede hacer que la balanza se incline a favor de actuar, por lo que puedes optar por enfocarte en los aspectos positivos de la situación, dando poder a la curiosidad, o centrarte en los negativos y esconderte tras el miedo.

4. Las preguntas son el idioma de la curiosidad

Formula preguntas acerca de las cosas y los acontecimientos. Qué, cómo, cuándo, dónde y por qué, serán el primer paso para que tu mente se abra a un conocimiento más amplio y profundo.

La vida es un viaje de aprendizaje. Hay mucho para aprender y mucho por conocer. Desarrollar la curiosidad significa poner en marcha el motor que nos guiará en nuestro viaje.

¿Y tú? ¿Te has planteado empezar tu propio viaje de descubrimiento personal?

En Psicología en el Bolsillo te orientamos y acompañamos en tu búsqueda. Pulsa en este enlace y empieza tu terapia de forma 100% online.

Imágenes: Pixabay