Las personas resilientes han atravesado acontecimientos muy duros pero disponen de una serie de características que les permiten sobreponerse a las adversidades con relativa facilidad.
De vez en cuando, oímos historias sobre personas que han pasado por un trauma terrible o una tremenda dificultad, y arrastran secuelas durante toda la vida.
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En el otro extremo del espectro, escuchamos historias de personas que han sufrido un calvario similar y sin embargo, han logrado sobrevivir con, lo que parece ser, muy pocos efectos psicológicos. Son capaces de vivir la vida sin señales aparentes de haber pasado por un trauma.
Esas personas son lo que se conoce como resilientes.
Personas resilientes: Algunos rasgos característicos
Ya veis que cuando las personas sufren una crisis importante, pueden darse dos resultados muy diferentes. ¿Cómo se explica que el segundo tipo de personas al que nos referimos sea tan resistente?. ¿Qué hay en ellos que los haga reslientes?.
Antes de responder a estas preguntas, debemos entender qué significa que las personas sean resilientes.
La resiliencia es un conjunto de actitudes de los individuos acerca de sí mismos que influyen en sus comportamientos y las habilidades que desarrollan.
Estos comportamientos y habilidades, a su vez, influyen en este conjunto de actitudes de forma bidireccional, se alimentan el uno al otro.
Este conjunto de actitudes típicas constituyen una mentalidad de fortaleza que incluye los siguientes aspectos:
- Las personas resilientes sienten que tienen el control de su propia vida.
- Los resilientes saben cómo hacerse resistentes al estrés.
- Las personas resilientes son empáticas.
- Estas personas saben cómo gestionar sus sentimientos y emociones.
- Los resilientes tienen buenas capacidades comunicativas e interpersonales.
- También es característico de estas personas que tengan facilidad en la resolución de problemas y en la toma de decisiones.
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- Las personas resilientes establecen sus metas de forma clara y tienen expectativas realistas sobre las mismas.
- Suelen ser compasivos y comprometidos con la sociedad.
- Los resilientes viven su vida de acuerdo a sus valores y reflexionan sobre ellos.
- Son personas que se sienten especiales de forma no egoísta y ayudan a los demás a sentirse de la misma forma.
- Las personas resilientes suelen ser optimistas.
- Por último, suelen ser flexibles, se adaptan a los cambios y superan los obstáculos.
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Tener una mentalidad resiliente no significa que uno esté libre de estrés, conflictos, o presión. Sólo quiere decir que uno es más capaz de resolver o hacer frente a los problemas que puedan surgir.
Una de las características más importantes de la mentalidad de estas personas es que, al igual que otras habilidades, se puede adquirir o ejercitar.
La resiliencia no es un rasgo que la gente tiene o no tiene. Todos tenemos la capacidad. La diferencia es que algunas personas tienen una actitud más optimista que otras hacia su desarrollo.
No es fácil, pero con el trabajo, la paciencia, el tiempo y la práctica, podemos entrenar nuestra mentalidad para ser más resilientes.
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